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  • El Uniandino

La opción de Aprobado/Reprobado ya es una realidad


Así lo anunció la vicerrectoría académica en un comunicado enviado el día de ayer en el que se hacía pública la decisión. El Uniandino le cuenta cómo y por qué se tomó la decisión, y sus posibles implicaciones.




El pasado 6 de mayo, el Consejo Académico de la Universidad de los Andes se reunió para evaluar un posible cambio en el sistema de calificación cuantitativa dada la pandemia y la coyuntura social y política del país. La propuesta “fue liderada por estudiantes sin cargos de representación”, según nos dijo Federico Calderón, representante ante el Consejo Académico, y contemplaba la posibilidad de reemplazar las notas numéricas por valores cualitativos de “aprobado” y “reprobado”.


Para sustentar la idea, la estudiante en el Consejo Superior Laura Grandas realizó una encuesta en la que se preguntaba cuál de tres posibles escenarios sería el ideal para los uniandinos: un sistema de calificación numérico, uno cualitativo o uno mixto. Los resultados del sondeo, en donde participaron 5.4 mil estudiantes de pregrado y 130 de posgrado, hablan por sí solos: en todas las facultades ganó la opción de adoptar un sistema mixto de calificación, esto es, que los estudiantes pudieran elegir si se atenían a una calificación cuantitativa o si se regían por un sistema de aprobado/reprobado (A/R).


Resultados de la encuesta en pregrado con datos disponibles. Gráfico cortesía de Laura Grandas.

Tras una semana de discusión interna entre las facultades, el viernes 14 de mayo hubo una reunión extraordinaria del Consejo Académico para discutir de forma definitiva la posibilidad de hacer el ajuste.


Al final de la reunión se concluyó que la mejor opción era adoptar un sistema A/R opcional. Este consiste en que los estudiantes pueden escoger entre terminar el semestre bajo un sistema de notas cuantitativas o regirse bajo el sistema cualitativo. Cabe resaltar que, sin importar la opción que escoja el estudiante, el criterio se aplicará según las notas cuantitativas que haya obtenido hasta el momento.


Según le dijo a El Uniandino Raquel Bernal, vicerrectora académica, “la medida busca mitigar los potenciales riesgos de salud mental de los estudiantes que se encuentran en condición de vulnerabilidad alta asociada a la situación social y política del país durante las últimas tres semanas”. Y es que, de acuerdo con la información recogida por Grandas, hay varios estudiantes que viven cerca de zonas de manifestaciones, otros han sufrido pérdidas de familiares, o están bajo una situación económica agravada por la pandemia y el paro.


Esto no significa que la medida esté exenta de posibles efectos negativos. Como explica Calderón, si bien al inicio de la pandemia varias universidades del mundo adoptaron un sistema cualitativo, la mayoría ya retornó a un sistema numérico. Así, una institución futura que le pida las notas a los estudiantes uniandinos se podría encontrar con que hay dos semestres sin calificaciones.

Esto puede afectar en diferente medida a los estudiantes, según la carrera que se mire. Natalia Mejía, decana de la facultad de medicina, nos dijo que el 81% de los estudiantes de medicina entre quinto y último semestre votaron a favor de mantener la nota numérica. Según la decana, este resultado se relaciona con que el 65% de los futuros médicos hacen rotaciones en el exterior en el último año y varios terminan sus estudios de posgrado en Estados Unidos y Europa, por lo que no quisieran comprometer esas posibilidades.

Por su parte, Veneta Andonova, decana de la facultad de administración, le dijo a este periódico que en el consejo de su facultad no se apoyó la medida pues “es posible que las aparentes ventajas en el corto plazo de alguna de estas alternativas pongan en desventaja en el mediano y largo plazo a los estudiantes y la universidad”.


En cualquier caso, lo cierto es que la decisión se enmarca en una discusión más amplia sobre el sistema de calificación cuantitativo, conversación que viene dándose de forma sostenida desde el semestre 2020-1, cuando se implementó el sistema A/R como respuesta a la pandemia.


Tanto la vicerrectora académica como los representantes con los que hablamos opinan que la forma de calificación y los efectos que esta tiene sobre el aprendizaje se deben repensar. “La intención es definir pequeños ajustes al sistema de evaluación y calificación con el fin de que los estudiantes puedan aprender de manera más flexible, tomar riesgos sin temor a equivocarse, aprender por interés y no exclusivamente por la nota, y a que se disminuyen los niveles de estrés y ansiedad”, termina diciendo Bernal.



 

Por: Natalia Chavarro




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