Recuerdo a Sebastián Payán en algún pasillo del departamento de literatura por allá en el 2015, cuando yo estaba en primer semestre. Tengo buena memoria en rostros pero no en nombres. Eso lo descubrí hace poco cuando entré a la clase virtual en intersemestral de Taller Sonoro. Él era el profesor de la clase. Y no solo eso, era el director de 070 Podcast y editor de uno de mis podcast favoritos: Diana Uribe.fm. Como periodista sonora de El Uniandino, supe que tenía que hacer esta entrevista.
Este perfil es escrito y a la vez sonoro. Consta de cuatro partes. A lo largo de la nota, encontrará audios de la entrevista grabada así como recomendaciones podcasteras hechas por distintas personas del equipo del periódico El Uniandino.
Sebastián Payán es literato de la Universidad de los Andes con opción en periodismo, medios y estudios teatrales. Además de su experiencia periodística en 070, también ha trabajado en otros podcast reconocidos como Presunto Podcast, Cosas de Internet y Diana Uribe.fm.
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Era miércoles a principios de agosto. Apuntaba al mediodía. La luz de la ventana me daba directo en el rostro mientras entraba a la sala de Zoom. Ya me había arreglado de la cintura para arriba, claro, por si tocaba poner la cámara. Las nuevas mañas de la vida virtual. Finalmente Payan entró unos minutos después. Sin cámara. Nos saludamos, hablamos del inicio del semestre, de la vida virtual como cosa rara y empecé a grabar.
Retrato de un podcastero literato
La primera pregunta siempre es la más difícil y por lo mismo es muy fácil caer en clichés. Pero ni modo, por algún lado se empieza y tuve que hacerla: ¿Cómo un literato uniandino llega a la industria podcastera? ¿Cómo fue ese descubrimiento del mundo sonoro? Me respondió enseguida, sin dudas, como quien sabe la respuesta a una pregunta tantas veces escuchada. “Fue con la misma clase que ahora estoy dictando, la de Taller Sonoro, la vi diría —titubea un poco— en el 2015. Ahí fue cuando empecé a interesarme por los podcast. Ya después cuando entré a la revista 070 fue cuando pude enfocarme de fondo y surgió 070 Podcast creo que en el 2018”.
Payán relata esos años iniciales como si fuesen lejanos, a pesar de que el tiempo que ha pasado es relativamente corto. Pero como diría Marcel Proust, el escritor francés, el tiempo es elástico, pues las pasiones que sentimos lo dilatan y las que nos inspiran lo reducen. Quizá la pasión e intensidad laboral tendría que ver con esa mirada temporal. Me pregunto cómo esta energía narrativa de su pregrado, como la mía, puede aportar a la producción sonora. Después de seis años leyendo novelas y haciendo ensayos, cabe la pregunta.
En últimas, la habilidad de contar historias parece nutrirse de distintas raíces, y la literatura es aquel arte por excelencia de la narración. La marca de un literato en un podcast se hace evidente. ¿Cómo serían esas primeras incursiones sonoras de un recién egresado en comparación a cinco años después, con más experiencia? ¿Habrá cambiado? La pregunta es retórica, evidentemente, pero Payán se ríe en una especie de burla personal.
“El día que sepa muy bien todas las respuestas sobre los podcast, fácilmente ese día cambio de profesión” añade. Y en una industria tan reciente en Colombia como la podcastera, nadie tiene las respuestas ni las tendrá pronto.
Releí mis apuntes previos a la entrevista. Los entrevistadores tenemos una ardua tarea como “stalkers”, y aunque en algunos contextos podría contar como acoso cibernético, en periodismo se le llama investigación. Y claro, yo como buena aprendiz en periodismo, hice mi tarea. Por eso, recordé ese artículo que había leído en el CEPER sobre Sebastián Payán, ganador de una beca en el International Center for Journalists (ICFJ) para desarrollar un proyecto de podcast en el 2019. “Esa beca más que todo fue un intercambio laboral”, me explica. “Fue un proceso más que todo para aprender sobre cómo se está haciendo el podcast en Estados Unidos. Trabajé en NPR en Washington y en San Francisco y fue como un intercambio de conocimientos. Aprendí distintos ámbitos de cómo se está haciendo allá con la idea de traer esas ideas acá y fortalecer los podcast de 070 y de Colombia”.
Parece que siempre conoce de antemano las respuestas. Le pregunto qué aprendizajes trajo al escenario colombiano de esa experiencia. Aunque lo piensa unos segundos y titubea un poco, sus respuestas son muy estructuradas. “Por un lado, —nótese el conector argumentativo— los contenidos siempre tienen que mejorar y uno no se puede casar con una fórmula. Nosotros estamos todo el tiempo pensando cómo podemos cambiar y mejorar los programas, cuáles otros nos faltan, cuáles otras ideas y si te pones a comparar el número de estreno de programas de 2020 versus 2019, pues hay un aumento exponencial porque hay un aumento en los podcast narrativos, que es es el segundo aprendizaje”. Sus argumentos están conectados y tienen un hilo claro, como si fuese una historia o un discurso. Me impresiona que nunca divaga. ¿Gajes del podcastero o del literato? O una habilidad personal externa, no lo sé.
“Yo creo que uno, como se crió en la parte de podcast de Radio Ambulante, a veces el podcast narrativo intimida un montón porque cree que esa es la manera de hacerlo y tiene que ser a ese nivel. Entonces siento que el aprendizaje para nosotros ha sido: no dejarnos intimidar por el podcast narrativo —por Radio Ambulante y su genialidad, pienso yo — y hacer propuestas distintas realizables que no son como una versión desmejorada del podcast narrativo sino que es otra manera de hacerlo, una manera más realista”.
Dato uno: NPR, el lugar donde trabajó Payán, es la productora de Radio Ambulante, un podcast narrativo sobre historias de América Latina. Esa descripción no le hace justicia a todo lo que hacen, considerado por muchos —incluyéndome— el mejor podcast de habla hispana. Pero de seguro Carolina Calero, periodista sonora de nuestro podcast El Balido de Séneca, sí puede dar una buena recomendación:
La vida es muy corta para alcanzar a escuchar tantos podcast. Y algo que tiene este formato es que por su versatilidad y simultaneidad con otras actividades del día, una vez escuchas uno, nunca paras. Y con eso en mente, le pedí a Payán que me contara sobre los podcast narrativos recientes de 070. Para alargar más la lista de podcast que tengo pendientes. Igual que la lista de libros y películas.
“Yo creo que hay tres super interesantes: el de la serie No estamos preparados, que la idea es un poco jugar con el título de “No estamos preparados” para lo que puede suceder en pandemia. El pie en la puerta, lo hace la periodista Alejandra de Vengoechea que es profesora de maestría de periodismo en la universidad. Y el tercer experimento que hicimos fue el de Seis grados de separación, que es como un híbrido entre un podcast narrativo y un podcast de panel. Es como una entrevista narrada, alejándose del formato tradicional de la radio”.
Dato dos: un podcast de panel se refiere a un formato más parecido a la programación radial. Hay un presentador, una serie de invitados, se propone un tema y el podcast se desarrolla como una entrevista o discusión. En El Uniandino tenemos uno: El Uniandino te cuenta sobre. Les dejo una recomendación de uno de sus episodios por parte de la directora del equipo de podcast, Sara Cely:
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Siento un nudo en la garganta porque ahora sí debo hacerle una de las preguntas que más interés me produce: DianaUribe.fm. Tras seguirle la pista a esta historiadora desde la radio, en su trabajo por divulgar y hacer llamativa la historia fuera de la academia, llegué por primera vez a los podcast. Siempre me he preguntado cómo sería trabajar con ella, una figura con tanto peso por sí sola. Payán lo pensó por unos segundos y con un tono de humildad, aclaró que su labor era sonora; es decir, debía escoger la música, sonorizar el episodio, definir cuál es el tono que tiene cada parte, pulir los audios, pero del contenido no.
“Digamos que la experiencia de trabajar con Diana, uno no se la termina de creer porque pues es Diana Uribe, es una voz histórica dentro de la historia de la radio. Ella de alguna forma ya hacía podcast antes de que los podcast se pusieran de moda” En el fondo de su micrófono, el maullido de un gato suena,
y me doy cuenta que ahí radica la diferencia entre un programa radial y un podcast grabado en pandemia: en la naturalidad y espontaneidad de escuchar un gatito en medio de una entrevista.
¿Y cómo un literato podcastero llega a ser parte de este equipo? La pregunta del millón. En el fondo, es una pregunta personal porque quién no quisiera participar en el equipo del podcast más escuchado del país.
Recuerda por unos segundos y responde. “Yo llegué a ella porque en ese momento era editor en el podcast Cosas de internet, con Santiago Espinosa y Laura Rojas Aponte. Ellos dos también han sido cabezas del proyecto de Diana Uribe. Cuando yo entré a trabajar con Diana, ellos ya llevaban más o menos un poco más de diez episodios. Yo había comentado cosas que podrían mejorar del podcast y él me dijo: si quiere puede tener la oportunidad de mejorarlas para ser editor. Entonces yo le dije que me apuntaba”. Así de simple suena, ¿no?
Dato tres: Cosas de internet es un podcast sobre el modo en que vivimos debido al internet, o eso es lo que masomenos dice su página y no sabría de qué otra manera describirlo. Laura Rojas Aponte también trabajaba en Radio Ambulante, en su equipo de Crecimiento e Innovación. Así que todo este mundo podcastero parece estar conectado. Dejo la recomendación de uno de los episodios de este podcast por parte de Alejandro Lozada, director del periódico El Uniandino.
Dato cuatro: Sebastián Payán dice que Diana Uribe hacía podcast antes de que se inventaran, y es verdad, pues ella tiene una trayectoria de veinte años contando la historia en la radio. Pregúntele a sus papás si la conocen, y de paso escuchen juntos las recomendaciones que la sección de Cultura de El Uniandino trae en las voces de Melissa Betancourt y Paola López. Por ser Diana Uribe, la recomendación tenía que ser doble.
*Nota aclaratoria: Sebastián Payán fue editor de DianaUribe.fm hasta el episodio de Viaje a Eslovaquia y República Checa, publicado el 22 de agosto de 2020. La entrevista se hizo dos semanas antes.
La odisea del podcast en Colombia
Para el 2019, la comunidad de Podcasteros realizó una encuesta colaborativa que recolectó datos de consumo de podcast en audiencias hispanohablantes. De los más de dos mil voluntarios que llenaron la encuesta, Colombia obtuvo la mayor participación. Sin embargo, el podcast es una industria muy reciente en el ámbito latinoamericano y nacional, en comparación con Estados Unidos.
“Pues lo que ha pasado es que el interés ha aumentado bastante”, responde Payán. Yo le pregunto qué ha cambiado en los últimos tiempos, sobre todo en los pandémicos, donde las voces de un podcast pueden ser grandes compañías en la casa. “También la facilidad de hacerlo pues la gente le tiene menos miedo al formato. Todavía se mantienen fórmulas demasiado similares a la radio como mesas de conversación y ya. Esto no significa que sea un mal formato pues nosotros hacemos bastante de esos, pero también hace falta esa diferenciación de la radio tradicional. Sigue siendo un proceso, sigue siendo algo que todavía está arrancando”. Se muestra optimista frente a ese impulso reciente que ha tenido la industria, incluso cuando le hablo sobre qué significa vivir económicamente de ella.
Pero me dice que cada vez la audiencia está entendiendo la importancia de su participación dentro de esto, pues aunque falta mucho, se está transformando. “A medida que hayan proyectos colombianos más exitosos, significa que hay un interés del mercado por los podcast. A medida que aparezcan proyectos como el de 070 podcast, el de Cartagena federal, los de Presunto Podcast, a medida que todos estos vayan creciendo, termina siendo una bola de nieve para los demás”. Mientras dice estos nombres, yo los anoto en un cuaderno para extender mi lista de pendientes. “El mercado se puede interesar por eso a partir de cosas como la pauta, que todavía está muy lejos de ser ese método de financiación que ya en Estados Unidos está”.
Dato cinco: En Presunto Podcast critican el papel que hacen los medios y analizan su papel en el contexto nacional, es decir, periodistas que analizan periodismo. Carlos Morón, periodista sonoro del podcast El Balido de Séneca, explica por qué deberíamos escuchar cualquiera de sus episodios:
Dato seis: Cartagena Federal es un podcast de relatos de la cotidianidad de esta ciudad icónica, pero desde la perspectiva de los mismos cartageneros, sin cliclés turísticos, con una narración que envuelve hasta al más rolo. Como yo. Esta vez soy yo la que recomienda un episodio porque los descubrí haciendo esta entrevista y me enganché con ellos:
Pienso en 070 y su financiación. ¿Cómo es su relación con la institucionalidad? “Aunque la revista hace parte de la universidad también tiene una independencia económica que ha generado a partir de 070 proyectos”, me explica como quien hace énfasis en un tema complejo. “Por ejemplo, en la alianza que tenemos de producciones para distintas facultades dentro de la universidad, de ahí han salido proyectos como Clase a la casa, Contra todo pronóstico, el del CIDER, más que todo en ese vínculo entre la academia y el periodismo. Y también los externos que hacemos como Todo es político. Y ésa ha sido la manera en que nos sostenemos económicamente para hacer otro tipo de proyectos narrativos”.
Dato siete: No haré toda la tarea. Solo contaré sobre uno. Contra todo pronóstico es un podcast de 070 y el Observatorio de la Democracia sobre historias de mujeres que desafían las estadísticas. Alexandra Rivera, periodista sonora de El Balido de Séneca recomienda:
El valor de las historias sonoras
“Tú puedes escuchar historias que hablen acerca del amor, de la amistad, de las redes de solidaridad, de también de la valentía y de la ambición. Asuntos que tocan diversos puntos de la condición humana. Yo creo que eso es lo que hace la gran literatura latinoamericana y creo que de algún modo Radio Ambulante está colaborando a eso y decir cómo miran los latinoamericanos el mundo, cómo leen la realidad, cómo comunican su manera de estar en el mundo. Eso me parece fascinante y es algo que yo como oyente agradezco un montón”
Joseph Zarate, editor en RA.
Escuchado en este episodio de Hagamos esa vaina de la radio.
En literatura usamos las letras para crear las voces de los personajes y construir historias. En periodismo escrito visibilizamos unas voces existentes y organizamos la historia en un artículo. Pero en el podcast, literalmente, eliges las voces reales grabadas, con todos sus matices, sus tonos y quebrantos para construir la historia sonora. Por eso pregunto: ¿Cómo decides qué formato resulta más ventajoso para contar algo? “En últimas depende un poco de qué es lo que uno quiere hacer con una historia. Siento que hay historias que les va mejor en distintos formatos. Además también depende de qué es lo que uno quiere mostrar. Pero con el podcast uno puede alcanzar una intimidad y como una cercanía con la voz que está escuchando mucho más fuerte”. —Usted, lector y oyente, puede comprobar esto si lee el texto anterior y escucha el audio acá:
¿sintió más intimidad? —
“También tiene la ventaja de ser algo que uno puede escuchar mientras hace otra cosa. El texto y el video te demandan la atención de estar viendo la pantalla del celular o la pantalla del computador pero al menos con los podcast puedes estar haciendo otra cosa también”, así el podcast termina siendo hijo del multitasking.
Eso como oyente, pienso. Pero como productor: ¿cómo evalúas si la historia debería ser contada en un formato sonoro o no? “Como productor, los podcast tienen dos ventajas. Una, es que siento que ayudan a que temas que son muy ladrillos o difíciles de entender, con el formato podcast uno se engancha más o le tiene un poco menos de barreras a la hora de interesarse por esos temas”. El ejemplo claro es DianaUribe.fm, pues yo como historiadora sé que mis trabajos no son tan llamativos como pueden ser los de un diseñador o un ingeniero mecánico.
“Por otro lado, el podcast te permite a veces ponerte retos un poco difíciles sobre cómo describir una persona sin el apoyo visual. A veces uno con el texto puede poner una foto o con el video puede mostrar también, pero tener el reto de sólo tener el audio y tener que mostrar tantas cosas, te da una inyección de creatividad a la fuerza”. Una de las experiencias más extrañas en los podcast (y en la radio) es cuando después de acostumbrarte tanto a escuchar la voz de una persona, encuentras una foto o un video de su rostro. Es un descubrimiento extraño.
Hoy en día los podcast tienen esa ventaja también de decirnos cosas que no se han dicho antes o decirlas de otra manera. Yo le pregunto a Payán si los podcast aportan algo específico al modo de contar nuestro país, aunque enseguida siento que fue una pregunta de reina de belleza. Él responde sin problema.
Y vale la pena repetir esto: “creo que la oportunidad que hay con los podcast es ver qué otro tipo de voces escuchamos, qué tipo de historias escuchamos que no lo hacemos en otro formato”.
Y en el caso de 070, ¿qué acciones toman para diversificar esas voces del país?
¿O se entiende mejor con el texto? Aquí va la segunda parte de la respuesta. “El gran problema que existe es que muchas veces ni siquiera se hace la pregunta. Si uno revisa las voces que se escuchan o que narran los podcast en 070, se encuentra una minoría que son hombres. Ya eso es una diferenciación de lo que pasa en la radio tradicional, donde lo que más hay son voces masculinos y temas masculinos”.
Epílogo
Llevamos ya casi treinta minutos hablando. Aunque los nervios iniciales se han disipado, no dejo de pensar en sus facciones, si está mirando el reloj, si está revisando correos mientras responde, o si está analizando mis preguntas y al final me va a hacer un comentario constructivo (destructivo). Fue mi profesor, así que hay doble tensión. Resultan extrañas las entrevistas en este formato. Le digo que me quedan dos preguntas, aunque terminan siendo tres.
En las entrevistas en editoriales, siempre le preguntan a un escritor cuál es el libro que más recuerda haber disfrutado escribir, y la respuesta nunca satisface porque escribir libros no es como comprar varios helados y elegir el favorito. También la analogía sirve si le pregunto a mi mamá cuál fue el hijo que más le gustó hacer. Mi mamá tendría la misma respuesta de Payán, cuando le pregunto cuál es el episodio o el podcast que más le ha gustado producir:
Esto lo voy a publicar en un medio universitario, pienso, y quiero que estudiantes universitarios escuchen podcast. ¿Por qué valdría la pena empezar a escucharlos en esta etapa de la vida? Se ríe y titubea.
Creo que por fin encontré una pregunta que no le habían hecho o que él mismo se había cuestionado. “Hay que aprovechar la facilidad que tenemos para escuchar otras voces y otros relatos. Van a aprovechar mucho el tiempo libre que tendrán como estudiantes, y ya por eso se me acaban de sumar 30 años más”. Parece más relajado, más risueño. Así que le hago la última pregunta, de naturaleza cliché como la primera, pero obligatoria: ¿Me puedes recomendar tus podcast favoritos?
“No voy a hacer trampa y recomendar los míos pero pues digamos que cualquiera de 070 es maravilloso. Yo creo que recomendaría por un lado Today explained de Vox. Es un podcast que escucho bastante, lo disfruto mucho porque conocí también el equipo de producción en Estados Unidos y es una gente increíble que admiro un montón. Por otro lado, El hilo de Radio Ambulante. Pues Radio Ambulante como siempre nos da escuela en todo, entonces ese también ha sido un referente importante para mí”
Dato final: El hilo es un podcast de Radio Ambulante Estudios que no solo cuenta historias sino que brinda un análisis y contexto de las noticias en América Latina. Esta última recomendación va por cuenta de Miranda Bejarano, periodista científica de El Uniandino.
Por: Gabriela Herrera Gómez.
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